"Suzume", una historia de duelo y superación
La película "Suzume" del director Makoto Shinkai plantea dos preguntas fundamentales: cómo los lugares donde vivimos nos conectan unos a otros y qué pasa con nosotros cuando esos lugares son olvidados y abandonados en ruinas. Aunque en un principio puede parecer una historia de amor cruzando el tiempo, la trama se centra en realidad en una historia de duelo y superación.
El impacto de los desastres naturales en nuestras vidas
El director Makoto Shinkai ha hecho explícito el impacto que los desastres naturales han tenido en la historia de Japón en sus últimas tres películas, incluyendo "Suzume". En estas producciones, seguimos a protagonistas que se ven afectados por el caos provocado por desastres ajenos a ellos y cómo pueden superar los obstáculos para estar juntos. Sin embargo, en "Suzume" ocurre algo fundamentalmente diferente.
Una historia de duelo y superación
Mientras que en "Your Name" y "El tiempo contigo" el enfoque principal está en la relación entre los protagonistas, en "Suzume" el enfoque se desplaza hacia el duelo y la superación de la pérdida. La película sigue la historia de Suzume, una chica de 17 años que pierde a su madre en el trágico terremoto de Tohoku de 2011. A través de su viaje por todo Japón para cerrar las puertas que han liberado monstruosas bestias, Suzume debe enfrentarse a su dolor y aprender a sanar sus heridas.
"Suzume" plantea una historia de relaciones personales. No solo se centra en el drama y el romance entre Suzume y Souta, sino también en los espacios que visitan y el significado que le damos a las cosas. La película aborda el duelo personal que Suzume lleva consigo desde la muerte de su madre y cómo debe aprender a lidiar con él para poder seguir adelante.
"Suzume" no es solo una película de animación, sino también una reflexión sobre la importancia de los lugares donde vivimos y cómo nos conectan unos a otros. A través de la historia de Suzume, Makoto Shinkai nos invita a enfrentar nuestros miedos y aprender a sanar nuestras heridas para poder seguir adelante.
El viaje de Susume y Souta por todo Japón
Al inicio de la película después de abrir la puerta y levantar una figura del suelo (un puntal) que se transforma en un gato, Suzume libera sin querer un portal a través del cual una monstruosa bestia de gusano tintada de rojo sale para causar caos y destrucción natural en todo Japón. Suzume debe ayudar a Souta, un "cerrador" que se dedica a encontrar y cerrar puertas del más allá para prevenir terremotos y tsunamis, a cerrar estas puertas antes de que sea demasiado tarde.
El viaje de Suzume y Souta por todo Japón para cerrar las puertas que han liberado monstruosas bestias no solo es un viaje personal, sino también un viaje colectivo a la memoria de muchos japoneses. El director Makoto Shinkai elige ciudades que han sufrido tragedia y desastres en su historia. Suzume y Souta viajan a ciudades que han sufrido tragedias y desastres en su historia, como Ehime en Shikoku, donde en 2018 se sufrieron lluvias torrenciales que causaron grandes derrumbes; Kobe, donde experimentaron el gran terremoto de 1995; y Tokio, donde hace 100 años en 1923 se sufrió el gran terremoto de Kantō.
Cada lugar que visitan está lleno de recuerdos y memorias de aquellas personas que atravesaron los espacios que ahora están en ruinas. Estos recuerdos alimentan la magia para crear una cerradura donde se puede dar un cierre a esos espacios y a esas personas. El sanar heridas reconociendo el pasado y al mismo tiempo permitiéndose avanzar.
El clímax de la película
El clímax de la película ocurre cuando Suzume entra al "siempre después" a través de la misma puerta en la que recuerda haber entrado cuando era una niña, ahora ingresa para rescatar a Souta y restaurar el puntal. Después de recibir ayuda de los gatos Daijin y Sadajin que se transforman en puntales, Suzume y Souta logran sellar de nuevo al gusano y detenerlo.
Una vez que logran sellar al gusano, Suzume ve a su yo más joven vagando por esta dimensión donde se había perdido de pequeña una vez que ocurrió el terremoto. Suzume va con su pequeña ella a consolarla, dándole la silla que su madre le había construido antes de morir y asegurándole que crecerá y se enamorará, conocerá muchas personas que la querrán y la harán muy feliz.
La filosofía japonesa del Kintsugi
Hay una filosofía japonesa que creo nos habla directamente de esto: el Kintsugi. Una técnica de reparación de cerámica rota que nos habla de cómo las piezas reparadas pueden ser más hermosas gracias a sus roturas, gracias a sus cicatrices.
El mensaje de la película
Makoto Shinkai vuelve a implementar el uso de la ciencia ficción, el tiempo y el amor en esta ocasión para darnos un mensaje acerca de la importancia y el poder de las memorias. Nuestras conexiones con sucesos y personas que amamos actúan como puertas y puentes que nos unen unos a otros a través del tiempo y a través de los espacios donde vivimos.
Las tragedias y catástrofes son parte de nuestra experiencia humana y lo único que podemos hacer con ellas es aceptar su rol como algo más grande que nosotros mismos, seguir adelante y mirar siempre al futuro con esperanza. Las ciudades que Suzume atravesó a lo largo de la película son un recordatorio de que las heridas pueden ser los cimientos de un posible futuro.